¿Dónde se encuentran los receptores del tacto?

Debajo de la piel se halla una compleja estructura con terminaciones nerviosas sensoriales, denominadas receptores del tacto, que perciben el contacto con objetos, sustancias, etc.

Se encuentran distribuidos irregularmente en la dermis y la epidermis. Pueden clasificarse en diferentes tipos: los discos de Merkel (alojados dentro de la epidermis o debajo de ella), que perciben la presión de los objetos; los corpúsculos de Meissner (situados en las papilas dérmicas de la punta de la lengua, las manos, los pies, los pezones, el interior de los párpados), que reconocen la parte del cuerpo que se toca; los corpúsculos de Ruffini (ubicados en la dermis), que informan sobre el estado de deformación de los tejidos cuando son presionados; los corpúsculos de Pacini (entre el tejido subcutáneo y la dermis), que transmiten las sensaciones de movimientos de objetos sobre el cuerpo y las de vibración: y por último los corpúsculos de Golgi y Mazzoni (situados en la zona subcutánea de los dedos de la mano), que se relacionan con la percepción de la presión.

¿Cuáles son las sensaciones que se perciben de los objetos?

La superficie de las cosas que rodean al hombre es percibida por su textura (lisa o rugosa), su temperatura (fría o caliente) y su consistencia (dura o blanda), entre otros atributos. El dolor es una sensación de malestar que puede provenir del exterior o del interior del organismo. A veces, los estímulos resultan dolorosos, como el calor excesivo, o la presión fuerte. En estas sensaciones, el estado psicológico de la persona cumple un papel fundamental, pues modifica la tolerancia al dolor.