¿Cuáles fueron los maestros holandeses?
En el siglo XVII, durante el período barroco, diferentes factores influyeron en el desarrollo y expansión de Holanda, entre los que se destacaron su independencia del gobierno español y el florecimiento alcanzado por su comercio con todo el mundo.
La expresión plástica holandesa fue el reflejo de esa realidad, alejada de la temática religiosa. Sus artistas realizaron una pintura realista e intimista, basada en paisajes, naturalezas muertas, bodegones, escenas de la vida cotidiana, interiores, y relatos individuales y colectivos.
Se destacaron las obras de Jan Vermeer (1632-1675), cuyas composiciones de la vida diaria denotan maestría en la representación del espacio y de la perspectiva, dentro de una atmósfera dominada por el claroscuro; y las pinturas de Gerard Terborch (1617-1681) y Pieter de Hooch (1629-1684), cuyas escenas interiores, habitaciones y patios están trabajados con acentuado realismo y preciosismo en los detalles.
En el campo del retrato sobresalen dos artistas: Frans Hals (1580-1666), quien plasmó sus personajes con pinceladas rítmicas y espontaneidad en la expresión; y Rembrandt van Rijn (1606-1669), que además de sus famosos retratos abarcó una gran variedad de temas, todos ellos con acentuados contrastes de luces y sombras y dinamismo en el color.
¿Cuáles son las obras más famosas de Rembrandt van Rijn?
Entre sus retratos colectivos sobresalen La lección de anatomía del Dr. Tulp (1632), Ronda de noche (1642) y Los síndicos (1662). Además, desarrolló gran maestría en el dibujo y en el grabado, especialmente en los aguafuertes. Otros notables maestros holandeses del siglo XVII fueron Jacob van Ruisdael, Meindert Hobbema, Willen van der Velde, Hendrick Avercamp.